En Corea, 선물 (Seonmul) significa regalo. Etimológicamente y de acuerdo con la Real Academia Española, esta palabra encuentra su definición como dádiva que se hace voluntariamente o por costumbre. Pero, ¿qué simboliza recibir un regalo? Personalmente, ¿qué valor le damos a lo que recibimos sin esperar?. Cuando nos dan un obsequio, lo tratamos como un tesoro inigualable; como algo que no fácilmente se reemplaza. Y no solamente por el valor tangible, sino porque ello provocará en nosotros un recuerdo que jamás podrá olvidarse.
Eso ocurrió cuando recibí los presentes que a continuación enlistaré. Cada que me acompañan, no solamente viene a mi memoria la persona que me los dio, también rememoro los instantes únicos y aquello que me apasiona desde hace ya 13 años: Corea.
Yeongpil aventurero y escritor
El primer regalo que recibí de Corea, reafirmó mi gusto por las tradiciones y cultura. Además, de tomarlo como una señal para continuar en el camino de la escritura. Éste llegó a mí, justo hace un año cuando comencé a escribir para korea.net. Ilce, una de mis colegas y amigas tuvo la oportunidad de viajar por intercambio estudiantil al país que, puedo afirmar, a ambas nos emociona. Recuerdo muy bien cómo ocurrió: Entre pláticas y consejos, salió a la conversación mi gusto por la escritura desde hace ya varios años y tener la oportunidad de poder ser parte de la comunidad de Reporteros Honorarios, acrecentó aún más el sueño de continuar en el camino de la magia de las palabras. Sus palabras, llenaron mis ojos de lágrimas pues, este obsequio llegó a mi acompañado de un: Traje esto para ti, porque recordé que te gusta escribir de Corea. ¡Wow! Algo que comenzó como un gusto, que después evolucionó a mi identidad, para ahora ser parte de mi profesionalismo estaba dando sus primeros frutos y reconocimientos.
Cuando tuve la oportunidad de revisar con detenimiento este presente, me di cuenta que alrededor del bolígrafo tiene escrito el Hangul completo, además de venir acompañado de un colgante con salamdeul (personas en coreano) vistiendo un hanbok (vestimenta tradicional coreana). Al investigar más, supe a través del sitio web Koreana que, actualmente, este tipo de obsequios encarnan fervientes deseos de buena salud y bienestar, así como de paz y felicidad. ¡Y cómo no ser feliz! Si el escribir junto con Corea han traído rachas de buena fortuna hacia mi.
Como por arte de magia, ese mismo día recibí de una persona que ha sido parte fundamental e importante de mi trayectoria profesional y personal, un llavero con una representación de una mujer portando un hanbok. Esto no solamente reafirmó los buenos deseos de la intención, también la continuación de mi admiración y respeto a quien me lo regaló.
Estos obsequios me han acompañado durante esta gran aventura de ser Reportera Honoraria y, estoy segura, que aunque la tinta del bolígrafo se termine o los colores del llavero desaparezcan, siempre estarán presentes en cada una de las hojas que me faltan por llenar.
Ser Reportera Honoraria. Una experiencia inigualable
Dicen que el tiempo es perfecto y hoy lo creo aún más. Como si la vida tuviera un reloj para medir la fortuna, justamente a un año de recibir los regalos que mencioné, llegó a mi un paquete que reafirma aún más mi labor dentro de los medios escritos. Desde el comienzo del periodo de Reporteros Honorarios 2024, el Ministerio de Cultura, Deportes y Turismo de Corea, anunció en la ceremonia de inducción para K-Creadores de Contenido, que llegaría a nosotros un kit de reporteros, para hacer constar nuestro gran y arduo trabajo. Cada día que pasaba desde ese anuncio era una gran tortura, pues no sabíamos con exactitud cuándo es que lo tendríamos en nuestras manos.
A toda hora veía cómo es que éste llegaba a diferentes partes del mundo. La espera fue larga, pero ha valido la pena. Hoy, 26 de junio del 2024, llegó a mi el certificado oficial que me avala como Reportera Honoraria del periodo 2024-2025. Además de nuevamente encontrar en mi camino una pluma, que será ahora la encargada de formar trazos que ayudarán con estas nuevas aventuras por plasmar, me quedo con una enorme emoción por saber qué ocurrirá en este periodo. El primer año, sin duda alguna, estuvo repleta de experiencias que hicieron que mi fascinación por aprender más de la cultura coreana creciera y no solamente eso, sino el tener como meta llegar a más personas a través de las palabras. Porque estoy segura de algo, cada reseña, misión, reportaje o artículo que se encuentra en la página web de los Reporteros Honorarios, genera en los lectores alrededor del mundo una emoción única por saber más de todo aquello que escribimos.
Redacto esta reseña no solamente para expresar la emoción, gratitud y felicidad que nos dio recibir este kit, sino también para Merit del futuro que estoy segura leerá esto dentro de un año: No sé qué pase en estos 308 días que nos faltan de labor como Reportera Honoraria, pero lo que sí puedo asegurarte es que cada día estará lleno de conocimiento, experiencia y creatividad. Porque de la mano de nuestro gusto por Corea, todo saldrá bien.
How about this article?
- Like6
- Support1
- Amazing12
- Sad0
- Curious0
- Insightful1